15/02/2025
A menudo se piensa en los cerdos como animales sucios y poco inteligentes, pero la verdad es que esta imagen dista mucho de la realidad. Los cerdos son criaturas asombrosas, capaces de aprender tareas complejas, comunicarse de formas elaboradas y mostrar una inteligencia que sorprende a muchos. Lejos de ser descuidados, son animales inherentemente limpios y con hábitos sociales complejos que demuestran su naturaleza fascinante.

Su relación con los humanos es antigua, datando de hace miles de años, incluso antes que la de las vacas. Hoy en día, su presencia es global, con miles de millones de individuos en todo el mundo, y aunque la mayoría vive en entornos rurales, algunos han encontrado un lugar en los corazones de personas en la ciudad como mascotas, desafiando aún más las percepciones comunes. Explorar sus verdaderas características nos permite apreciar la complejidad y el valor de estos seres sintientes.
Inteligencia y Vida Social Sorprendente
Los cerdos son animales profundamente sociales. Son capaces de forjar vínculos sólidos no solo entre ellos, sino también con personas y otras especies. Disfrutan viviendo en grupo y a menudo duermen acurrucados, mostrando afecto al frotar sus narices. De hecho, este gesto de frotar narices es una de sus formas favoritas de saludo, una muestra más de su complejidad social.
Su inteligencia es uno de sus rasgos más destacados. Se encuentran consistentemente entre las cuatro especies más inteligentes del planeta, superando incluso a los perros en ciertas pruebas cognitivas. Su nivel de inteligencia se compara a menudo con el de un niño de tres años. Esta capacidad cognitiva les permite realizar acciones como reconocer sus propios nombres, obedecer órdenes que se les dan y utilizar herramientas como espejos para encontrar comida, lo que demuestra una autoconciencia básica.
Además de su inteligencia, los cerdos poseen una memoria excelente. Son capaces de recordar direcciones y encontrar su camino de regreso a casa incluso a través de distancias considerables. También tienen una notable habilidad para recordar a personas y a otros cerdos con los que han interactuado, lo que subraya la importancia de sus relaciones sociales y su capacidad de aprendizaje a largo plazo.
No solo son inteligentes y sociales, sino que también adoran divertirse. Al igual que los niños, disfrutan de juegos, correr y explorar su entorno. Tienen una habilidad innata para transformar objetos cotidianos, como cajas de cartón, en juguetes improvisados, mostrando su curiosidad y su naturaleza juguetona. Esta faceta de su comportamiento a menudo pasa desapercibida, oculta tras los estereotipos.
Incluso hay historias documentadas de cerdos que han actuado como héroes, salvando vidas humanas y de otros animales en situaciones de peligro, como incendios o ahogamientos. Poseen un gran corazón y muestran empatía; cuando perciben que otro ser, ya sea animal o persona, está en peligro o manifiesta malestar, a menudo intentan confortarlo o ayudarlo, demostrando una sensibilidad emocional notable.
Hábitos de Alimentación y Descanso
La fama de ser glotones precede a los cerdos, y si bien disfrutan de la comida, son mucho más sofisticados en sus hábitos alimenticios de lo que se cree. Como animales omnívoros, su dieta puede ser muy variada, consumiendo desde vegetación hasta pequeños reptiles. Sin embargo, esto no significa que coman sin discernimiento. Saben disfrutar de una buena comida, comiendo despacio y saboreando cada bocado.
Sus alimentos predilectos en un entorno natural incluyen hierbas, raíces, frutos y semillas. Tienen una gran capacidad de adaptación, ajustando su dieta según la disponibilidad de alimentos en su entorno, lo que les permite sobrevivir en diversos hábitats.

El descanso es otra prioridad fundamental en la vida de un cerdo. Aunque a menudo se les ve activos, también valoran mucho sus momentos de tranquilidad. Duermen un promedio de cinco horas al día. Sin embargo, pueden pasar periodos mucho más largos, hasta 19 horas al día, simplemente acostados y relajados, lo que indica la importancia del reposo en su ciclo vital.
La Riqueza de su Comunicación
Los cerdos son criaturas bastante elocuentes y se comunican constantemente entre sí utilizando un repertorio vocal sorprendentemente amplio. Lejos de limitarse a un simple 'oink', poseen más de 20 tipos diferentes de sonidos, cada uno utilizado en situaciones específicas. Estos sonidos pueden variar desde un saludo amistoso hasta expresiones de hambre o alarma.
Su capacidad para hacerse escuchar es notable. El gruñido de un cerdo adulto puede alcanzar los 115 decibelios, un volumen comparable al de la bocina de un coche, lo que les permite comunicarse eficazmente a distancia o en entornos ruidosos.
La comunicación entre madres y lechones es particularmente conmovedora. Los lechones son capaces de reconocer la voz de su madre cuando los llama, ya sea para comer o para amamantarlos. Se ha observado que las cerdas madres incluso 'cantan' a sus crías para calmarlas, una muestra de la profunda conexión y cuidado que existe entre ellas.
Limpieza y el Verdadero Propósito del Barro
Contrario al estereotipo popular, los cerdos son, de hecho, animales muy limpios. Tienen un comportamiento higiénico innato: nunca utilizan el área donde comen o duermen para hacer sus necesidades. Solo recurren a esto en situaciones extremas, como cuando no disponen de suficiente espacio en su entorno, lo que a menudo ocurre en sistemas de ganadería intensiva.
Además de mantener limpios sus espacios de descanso, a los cerdos también les gusta bañarse en agua si tienen la oportunidad. Entonces, ¿por qué se revuelcan en el barro? La respuesta no tiene que ver con la suciedad, sino con la termorregulación y la protección solar. Los cerdos no pueden sudar eficazmente para enfriar su cuerpo, a diferencia de los humanos. El barro húmedo les ayuda a disipar el calor en los días calurosos, actuando como un mecanismo de enfriamiento natural. Además, el barro seco sobre su piel les proporciona una capa de protección contra los dañinos rayos del sol, funcionando como un filtro solar natural para su delicada piel. Por lo tanto, la expresión 'sudando como un cerdo' es una imposibilidad fisiológica para este animal (aunque una teoría alternativa sugiere que la frase se refiere a un proceso metalúrgico).
Su lugar de descanso y vida se conoce tradicionalmente como chiquero o pocilga, un establo diseñado para el ganado porcino. Dentro de este espacio, si es lo suficientemente amplio, los cerdos mantendrán separadas sus áreas de alimentación, descanso y eliminación.
La Importancia de Entender a los Cerdos
Conocer las verdaderas características de los cerdos es crucial, especialmente en el contexto actual. Muchos cerdos viven en granjas industriales donde las condiciones les impiden expresar sus comportamientos naturales, como jugar, mantenerse limpios o socializar. Comprender sus necesidades físicas y mentales es el primer paso para abogar por mejores condiciones de vida para ellos.
A nivel global, miles de millones de animales, incluyendo cerdos, son criados anualmente para consumo humano. Las condiciones de sufrimiento y estrés en la ganadería industrial no solo causan crueldad animal, sino que también contribuyen a problemas de salud pública, como el abuso de antibióticos que podría desencadenar futuras crisis sanitarias.

Organizaciones como World Animal Protection trabajan para transformar este sistema alimentario insostenible, colaborando con gobiernos, productores y consumidores para mejorar el bienestar animal y proteger el planeta.
Toma Acción por los Cerdos
Cada persona puede contribuir a mejorar la vida de millones de cerdos y ayudar a combatir la crisis climática. Una forma efectiva es reducir el consumo de productos de origen animal y optar por fuentes de proteína basadas en plantas. Un cambio en nuestros hábitos de consumo puede tener un impacto significativo en la vida de estos inteligentes y sensibles animales.
Preguntas Frecuentes
¿Son los cerdos realmente sucios?
No, es un mito muy extendido. Los cerdos son animales limpios por naturaleza. Evitan hacer sus necesidades en el área donde comen y duermen, a menos que las condiciones de espacio reducido se lo impidan. Les gusta mantenerse limpios y se bañan en agua si pueden.
¿Cuánto tiempo duerme un cerdo al día?
Los cerdos duermen un promedio de unas cinco horas al día. Sin embargo, pueden pasar periodos mucho más largos, hasta 19 horas, simplemente acostados y descansando.
¿Qué tan inteligentes son los cerdos?
Son extremadamente inteligentes, considerados entre las cuatro especies más listas del planeta. Su capacidad cognitiva se compara a la de un niño de tres años. Pueden aprender rápidamente, resolver problemas y tienen una memoria excelente.
¿Por qué los cerdos se revuelcan en el barro?
No es por suciedad. Como no pueden sudar para enfriarse, usan el barro húmedo para regular su temperatura corporal en días calurosos. El barro seco también actúa como protección solar para su piel.
¿Dónde viven los cerdos?
Los cerdos viven en establos o pocilgas, que se conocen tradicionalmente como chiqueros. Dentro de estos espacios, si son adecuados, mantendrán separadas sus áreas para comer, dormir y hacer sus necesidades.
¿Qué comen los cerdos?
Son omnívoros, lo que significa que comen tanto plantas como carne, aunque prefieren alimentos como hierbas, raíces, frutos y semillas. Son capaces de adaptar su dieta a lo que esté disponible.
Si quieres conocer otros artículos parecidos a Mitos y Verdades Sobre la Vida del Cerdo puedes visitar la categoría Sofas.
